Os hemos hablado, en otras ocasiones, sobre cómo conseguir ampliar el espacio dedicado al almacenamiento en vuestra cocina. Sin embargo, hoy queremos mostraros cinco soluciones concretas que incluir en vuestra vieja cocina o, si vais a renovarla, en el diseño de la nueva. En todo caso, cinco propuestas sencillas que podéis acoplar como queráis.
1.- Armarios despenseros con cajones.
Cuánto te arrepientes de haber optado por las baldas y no por los cajones en tu mueble para guardar provisiones, ¿verdad? Cuando quieres darte cuenta, se te han caducado la mitad de los ingredientes que almacenabas al fondo, ¡algunos incluso ni te acordabas de que estaban ahí! Es decir, ocupan espacio de manera innecesaria.
No sufras, todo tiene solución. Instala cajones en el interior y clasifica todos tus alimentos. Quedarán ocultos detrás de la puerta, pero cuando abras esta y extraigas el cajón, ¡voilà!, todos tus alimentos aparecerán ante tus ojos. Se acabó tirar más comida innecesariamente o almacenarla durante años sin saberlo.
2.- Cajones “a la inglesa” o con pequeños cajones interiores corredizos.
Son un remedio fantástico para aprovechar al máximo el espacio disponible en la parte superior de tus actuales cajones, a menudo desaprovechado. Puedes emplearlos para guardar la cubertería, las especias, pequeños moldes y utensilios de repostería, abrelatas, peladores, etiquetas para congelar la comida… En definitiva, todas esas pequeñas cosas que nunca sabes muy bien donde guardar y que acaban rondando por diversos cajones o por la encimera.
Además, ¿sabías que de esta forma podrás ahorrar hasta un 30% del espacio de tu cajón? Compruébalo por ti mismo.
3.- Una campana moderna en la que es posible almacenar.
¿Tienes una campana de pared y te falta espacio de almacenamiento? Intégrala para convertirla en un modelo bajo mueble y aprovecha los huecos laterales y el espacio frontal que quedará libre.
Para ello, tendrás que diseñar un módulo a medida que se integre a la perfección con el resto de la cocina así que, confía en profesionales para hacer el trabajo de diseño y montaje. De esta forma, podrás guardar salsas, el tarro de la miel y el azúcar o tus semillas favoritas.
4.- Reciclaje bajo el fregadero.
Vidrio, envases, basura, papel y orgánico… ¿De verdad caben todos estos cubos debajo de tu fregadero actual? Seguramente no. De hecho, apostamos a que, como mucho, puedes meter tres de ellos, cuatro si apuras el espacio, por lo que el quinto está ocupando otro lugar de la cocina o de la vivienda. Vamos a solucionar esto.
Los muebles de reciclaje bajo el fregadero permiten disponer de tantos cubos como queramos, ya que podemos jugar con sus dimensiones, adaptándolos a medida, y colocarlos estratégicamente para que no falte ni uno. Es decir, se ajustarán perfectamente a tus necesidades de reciclaje.
Además, muchos de ellos incorporan un segundo nivel superior en el que puedes guardar utensilios de limpieza, pequeños cepillos, guantes, etc.
5.- Esquineros para grandes ollas y cacerolas.
Ocupan un montón de espacio y solo las usas de forma esporádica, por eso, las guardas en ese cajón esquinero al que te cuesta tanto acceder. Olvídate de esfuerzos y de sacar media batería de cocina para coger justo el recipiente que necesitas, con los sistemas de estructuras extraíbles para muebles de rincón podrás guardar todas tus ollas y cacerolas de gran tamaño y recuperarlas fácilmente cuando más las necesites.