No es que estemos en contra de los azulejos, en absoluto, pero si este año quieres reformar tu cocina para decorarla a la última, tienes que prescindir de ellos.
Te contamos por qué.
Bye, bye azulejos y ¡bienvenidos, nuevos revestimientos!
Los azulejos, al menos en toda la cocina, han pasado a la historia. Ahora se llevan otro tipo de revestimientos que ofrecen múltiples posibilidades decorativas y que conceden a esta estancia de la vivienda un aire diferente. Pintura, microcemento, vinilo decorativo… Existen opciones para todos los gustos. Toma nota:
- La pintura.
De primeras, podría parecer una locura, pero nada más lejos de la realidad. Las nuevas pinturas concebidas especialmente para cocinas o baños están a la altura de las circunstancias. Ofrecen buenísimos resultados, además de una gama de colores y tonalidades infinitas.
La pintura nos ofrece la posibilidad de renovar el color de la cocina cuando lo deseemos, de combinar colores en una misma pared, de dibujar figuras geométricas, de llamar la atención sobre ciertos rincones… Todo ello sin esfuerzo y a bajo coste. Y si te preocupa el frente de la zona de cocción o del fregadero, siempre puedes acudir a los azulejos, a las baldosas hidráulicas, al cristal o al acero inoxidable justo en esos lugares estratégicos. De hecho, puedes emplear estos materiales para crear una cenefa que proteja la pared justo sobre la encimera para después completar la decoración con pintura.
- El microcemento.
Es una tendencia cada vez más empleada por la homogeneidad que logramos al aplicarlo, lo cual se traduce en mayor armonía y equilibrio para tu cocina. El microcemento puede llenar toda la estancia. Empléalo hasta donde quieras. Puedes aplicarlo en las paredes, en estanterías y mobiliario bajo de obra, en la propia encimera…, y mantener un tono neutro para toda la cocina o combinar varios.
La madera es una gran aliada del microcemento a la hora de lograr espacios acogedores, apostar por ella en puertas, mesas y sillas es una gran opción.
- Del vinilo al papel pintado.
Aunque hace unos años era impensable, introducir el vinilo o el papel pintado en la cocina hoy en día es una sabia decisión. Y no solo porque resulta muy económica y sencilla de implantar, sino porque ofrece excelentes resultados en aquellos modelos diseñados de forma específica para la cocina y porque la variedad es ilimitada.
Existen papeles decorativos realmente bellos para lograr una cocina muy personal, y lo mismo ocurre con el vinilo, que podemos emplear sea cual sea nuestro estilo de cocina.
Y tú, ¿por qué material vas a apostar cuando renuncies a los azulejos en tu nueva cocina?